En conclusión la equitación es un buen deporte desde el elemento creativo, pero hay que tener tiempo y dedicación para dominar los caballos relacionados a cualquier baile.
La equitación se encuentra estereotipada por una sociedad que ha vivido bajo una influencia arraigada a un sólo deporte, lo cual ha provocado en éste los prejuicios de delicadeza y sólo hecho para mujeres.